Hay algunas grandes leyes que gobiernan todo el pensamiento, así como hay algunas leyes en química. Sabemos que el control mental es la clave del destino, y a fin de aprender a controlar el pensamiento, tenemos que conocer y entender estas leyes.
Una de las grandes leyes mentales es la Ley de Sustitución.
Esto quiere decir que la única manera de deshacerse de ciertos pensamientos es sustituirlos por otros. A un pensamiento no se le puede desechar directamente. Sólo puede hacerse sustituyéndolo por otro.
Pero si te interesas en otra cosa, te olvidas por completo de la anterior.
Cuando te llegan pensamientos negativos, no los combatas sino que piensa algo positivo. Preferiblemente piensa en Dios. Universo, etc.
Vuelve tu atención hacia algo completamente diferente.
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